Podías hacer de todo, desde sobornar al Plonk para que fuera hacia las manos de tus jugadores, al arbitro, comprabas jugadores, los administrabas, había un montón de razas, recuerdo a unas especies de ogros que eran buenos defensas (aunque quedaban obsoletos rápidamente), unos pulpos, avestruces, y cosas así.
El juego era sencillo, avanzabas por ciudades ganando las distintas copas, para acabar jugando la copa M.U.D.S., cada ciudad tenía su particularidad, recuerdo que había un terreno normal de cesped (la primera), uno con tocones, otro medio inundado y uno helado. La copa M.U.D.S. se jugaba contra un equipo especial de demonios alados en un campo especial. Recuerdo que Julián me contó que Alvaro se había acabado el juego, como era muy dificil ganar a los demonios, la solución fue aporrearlos hasta que dejabas a uno lisiado, como no tenían jugadores para sustituirlo ganabas el partido automáticamente.
En fin esos juegos de Ms-Dos...
Uno de los mejores juegos de la Historia...sin duda!
ResponderEliminarAún conservo el juego en discos de 5 1/4.
Por cierto, qué cabrones eran los demonios de la última liga :)
Ax
Yo creo que incluso conservo el manual de instrucciones con el cuadro de escudos que hacía de clave.
ResponderEliminarCreo que vosotros me lo copiastéis, incluso recuerdo al morningsinger hablando de este juego.
Por cierto, sí, acabé el juego en varias ocasiones y alguna de ellas hasta de forma limpia (fair-play!).
ResponderEliminarDe todas formas, como los demonios no tenían suplentes, la mejor manera era sobarle el hocico siempre al mismo demonio (preferiblemente colocado sobre los agujeros de vapor) y pasar del partido.
Al final se convirtió más en una verdadera terapia de desahogo que una táctica elaborada...
Ax
A mí me lo pasó "el señor de negro"(*)...siempre fué un visionario
ResponderEliminarAx
(*)Salesianos knowledge
Yo puedo jaztarme de haber sido capaz de descifrar las claves de acceso "a calcetín" en al menos dos ocasiones. Me hice mi propia tabla de claves, partida a partida. Que pedazo de juego!!
ResponderEliminarEn Fé y Obediencia,
J.
P.D. Batman: a4