Antes de observar con detenimiento las fotografías que aparecen más abajo, es necesario que nos pongamos en situación. Hace aproximadamente un par de meses, una persona muy amiga me comentaba el curioso incidente que había presenciado durante una visita nocturna al South Bridge de Edimburgo. El South Bridge es una construcción con fama de embrujada en todo el Reino Unido, cuyo origen se remonta al último cuarto del siglo XVIII. En aquella época los gobernantes de Edimburgo decidieron construir un viaducto al sur de la ciudad alrededor del cual rápidamente proliferaron todo tipo de comercios, normalmente humildes, que dieron lugar a la primera calle comercial de la ciudad. Muy pronto los arcos y pasadizos bajo el puente fueron ocupados por buhoneros, deshollinadores, herreros, vagabundos y otras gentes sin medios para costearse alojamiento en otros lugares más suntuosos de Edimburgo. La caótica proliferación de tiendas entorno al puente y la mala iluminación nocturna de la zona no tardó en atraer a maleantes y ladrones que aprovechaban esas circunstancias para cometer sus fechorías y ocultarse de la Justicia. En pocos años, fue obvio para los comerciantes que el lugar se había vuelto insalubre y paulatinamente lo fueron despoblando. A mediados del siglo XIX, todos los arcos (19) habían sido cegados o tapiados y sus galerías subterráneas selladas. Así pues, la estructura original del puente desapareció por completo, enterrada entre las casas, y solamente un arco quedó abierto para permitir el paso a los transeúntes. Aunque parezca increíble, todo Edimburgo olvidó la existencia de los arcos hasta entrados los años 80 cuando éstos se redescubrieron de forma totalmente accidental. Hoy en día, al menos una parte de los lóbregos sótanos puede volverse a visitar. Según parece, los guías aprovechan los recorridos nocturnos para narrar una buena cantidad de historias truculentas sobre el oscuro pasado de la construcción.
Hecha la introducción, vayamos al tomate. La noche en la que las fotografías fueron tomadas, el 2 de Agosto pasado, mi amiga había estado visitando el lugar en compañía de otra amistad. Es necesario aclarar que por las venas de esta persona corre la sangre de Kant, Hegel, Schopenhauer y Feuerbach, y que por tanto es alguien absolutamente escéptico hacia cualquier hecho que no sea medible o cuantificable en unidades físicas del Sistema Internacional. Terminada la visita, las turistas decidieron hacer una foto para inmortalizar el puente. Pacientemente esperaron a que las pocas personas que cruzaban por la calle abandonasen el lugar. Finalmente, mientras una vigilaba la calle, la otra tomó la primera foto que aparece más abajo. El proceso fue bastante rápido, la foto parpadeó un par de veces en el visor de la cámara digital y, para su sorpresa, la imagen mostró algo más que el puente y el grupo de gente a la salida del pub local. En la acera opuesta, a la izquierda de la imagen, bajo el arco, aparecía una persona, o lo que parecía ser una persona que no se encontraba allí en ese momento. Por supuesto, ambas se quedaron totalmente atónitas. Inútilmente buscaron con la vista a la “persona” que aparecía en la foto. Sin saber exactamente qué hacer, decidieron tomar más fotos desde la misma posición para comparar los resultados. La segunda foto muestra una persona “real” pasando bajo el puente y la tercera muestra el lugar vacío.
Puedo decir que he observado con mucho detenimiento la imagen y no he encontrado más significado que el evidente, es decir, que se trata de una persona que desapareció del lugar antes de ser descubierta. Hay que aclarar que la calle es bastante larga, lo cual no hace nada fácil desaparecer en, digamos, 15 segundos. Como antiguo investigador de los Mitos, interrogué personalmente y de modo inquisitorial a la autora de la foto intentando desenterrar detalles o recuerdos que ayudasen a esclarecer el asunto. Todo en vano. Las diferentes hipótesis se estrellaron contra la evidencia de que dos personas habían presenciado el hecho y que lo que quiera que hubiesen retratado se había esfumado en sus propias narices. Si alguno de ustedes, sabios redactores y lector/a, tuviera alguna idea sobre el origen de la afoto, por favor, siéntase libre de comentar su teoría.
y compararla con la imagen inferior
Muy inquietante. Mirando la foto mi análisis es el siguiente:
ResponderEliminara) Creo que se trata de una mujer
b) Y parece ir vestida de época. El vestido parece antiguo, muy antiguo...quizá victoriano o anterior. Parece que lleva una falda
azul con volantes blancos y un corpiño o corsé negro muy entallado. También podría llevar un pañuelo blanco o un tocado.
La pregunta inmediata es: hay fiestas tradicionales en esas fechas de agosto por la zona?. Quizá podría ser alguien disfrazad@
Otra cosa que me acojona bastante es comprobar que si esa "persona" no era amiga de tus colegas...se quedó posando, sin más. Me explico, la primera y segunda
foto tienen el mismo encuadre, pero hubo tiempo suficiente entre disparo y disparo para que las personas de la derecha y del fondo del tunel se movieran a otro sito. En cambio, en ese lapso de segundos, la misteriosa "persona" se mantuvo quieta. Y cuando digo quieta es que no se movió ni un milímetro entre el primer y segundo
disparo a pesar del aparente movimiento de la primera foto. Si os fijáis en la mancha negra que cubre la línea blanca contínua del carril izquierdo (pegada a
la acera). Respecto a dicha mancha, entre la primera y la segunda foto la figura no ha cambiado su posición.
Para más intranquilidad...yo diría que en la primera foto la parte de abajo de la figura, no es que no sea vea el azul de la falda porque se cambiase de ropa con la velocidad de Superman, es que el color negruzco que se ve es el de la pared, como si la parte inferior fuese semitranparente...
Lo único que me chirría es que sí parece tener sombra luego parece ser un cuerpo físico. Aunque algún listillo podría decir que los fantasmas no proyectan sombra...so far, la Mecánica Racional de Fantasmas aún no se enseña en las universidades y por tanto, cualquier hipótesis no debe ser tomada como regla (método científico). De hecho, el llamado "ectoplasma" es algo de carácter físico, luego posee masa, luego está sujeto a las mismas leyes referentes a las radiaciones en el espectro visible.
Llegado a este punto las hipótesis posibles se reducen a:
a) Te han gastado una BROMA (con mayúsculas)
b) Señores, con ustedes una de las mejores imágenes tomadas de una persona que nos observa desde "el otro lado".
Evidentemente todo lo arriba expuesto es mi opinión personal e intransferible fruto de una interpretación subjetiva, y tan acertada o errada como cualquier otra de éste o cualquier otro signo teniendo en cuenta la poca calidad de la foto.
Aprovecho la ocasión para amenazar con una serie de entradas de muy diversa índole que podrían llegar a ser consideradas como transgresoras con la naturaleza de la Nit...y que tendrán como objetivo el remover las bases de las creencias de nuestros lectores y acercarnos a los límites de la ciencia conocida.
Update:
ResponderEliminarEn la tercera foto la misteriosa figura también está presente, pero esta vez al final del tunel pegada a la pared de la izquierda.
Para seguir estudiando esto habría que saber la secuencia temporal exacta de las tres fotos: orden (1ª, 2ª y 3ª) y tiempo transcurrido entre dichas fotos, porque desde luego no se recorren 20 metros de túnel entre dos disparos seguidos de cámara.
Y lo más importante: cuántas copas llevaban encima?. Aunque la nocturnidad no ayuda al enfoque de la cámara, el notable desenfoque de la seguna foto implica un pulso deficiente...
Quizás la explicación que he dado no sea del todo clara para entender lo que aparece en las fotos, a saber:
ResponderEliminar- La primera foto empezando por arriba muestra la imagen (a la izquierda) de algo o alguien que no fue visto por quienes tomaron la foto.
- La segunda (que fue tomada en último lugar) muestra una persona 100% real que pasó un rato después por allí y fue usada como referencia para comparar con la primera foto.
- La tercera imagen (tomada en segundo lugar) muestra el puente aparentemente vacío. En realidad la persona que aparece en la segunda imagen aparece al fondo de la imagen, antes de cruzar el túnel.
Es necesario admitir que la calidad de las tres imagenes no es óptima. El enfoque de la segunda es especialmente no sólo por culpa de la cámara sino por el pulso de la asustada fotógrafa.
Haber empezado por ahí
ResponderEliminarPues ahora es cuando ya empiezo a dudar...porque que jodida casualidad que el travesti y la supuesta aparición fueron inmortalizadas -nunca mejor dicho- en el mismo punto.
Además el travesti da bastante más miedo